El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Aviv Kohavi, reveló el miércoles 25 de agosto que el Ejército aceleró sus planes operativos para un eventual ataque contra las instalaciones nucleares iraníes.

El presupuesto aprobado recientemente tiene ese objetivo, precisó el militar en alusión al paquete monetario adicional de unos 620 millones de dólares entregado a las FDI.

Horas antes, el ministro de Defensa Benny Gantz emitió una amenaza similar al advertir a diplomáticos extranjeros que Tel Aviv podría emprender una acción militar contra Teherán.

"Israel tiene los medios para actuar y no dudará en hacerlo. No descarto la posibilidad vernos obligados a adoptar medidas en el futuro", manifestó.

Los comentarios públicos de Gantz y Kohavi coinciden con la visita a Estados Unidos del primer ministro Naftalí Bennett.

En las últimas semanas el gobierno de Bennett incrementó sus amenazas contra Irán a raíz de un ataque contra un petrolero arrendado por una firma israelí frente a las costas de Omán.

Aunque la nación persa afirmó varias veces que no tenía ninguna responsabilidad en la incursión, tanto Bennett como otras figuras de su gabinete la responsabilizaron, sin presentar pruebas.

"Ahora es el momento de los hechos, las palabras no son suficientes. Es hora de acciones diplomáticas, económicas e incluso militares, de lo contrario, los ataques continuarán", subrayó Gantz a principios de mes.

En reiteradas ocasiones las autoridades de Teherán afirmaron que su programa nuclear tiene fines pacíficos con el objetivo de generar energía eléctrica, y advirtieron que responderán si son atacados.

La fuerza aérea israelí bombardeó en 1981 un reactor nuclear iraquí, acción que provocó duras críticas de la comunidad internacional y la aprobación de dos resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que condenaron la incursión.

Tomado de Prensa Latina.