Miles de personas sin hogar se sofocan y mueren en Estados Unidos tras la llegada del verano. Los que viven en carpas y bajo techos improvisados de plástico y lona son los más vulnerables a las altas temperaturas.
Lo desalentador de la situación es que ha aumentado el número de personas que viven en tiendas de campaña en medio de los desalojos de la era de la pandemia y el aumento de los alquileres.
"Durante el verano, es bastante difícil encontrar un lugar por la noche que sea lo suficientemente fresco como para dormir sin que la policía te eche", dijo Chris Medlock, un indigente de Phoenix, reseña un medio estadounidense.
El calor excesivo causa más muertes relacionadas con el clima en Estados Unidos que los huracanes, las inundaciones y los tornados juntos. En todo el país, el calor contribuye a unas 1 mil 500 muertes anuales, y los defensores calculan que cerca de la mitad de esas personas son indigentes.
Es un problema que se extiende por todo Estados Unidos, y ahora, con el aumento de las temperaturas globales debido al calentamiento global, el calor ya no es un peligro sólo en lugares como Phoenix. Este año es probable que se registren temperaturas superiores a las normales en la mayoría de las zonas terrestres del mundo.